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Por ANTONIO GARRIDO / Una asignatura pendiente sobre la que se ha expresado el rector de la Universidad de Jaén, Nicolás Ruiz. No tiene voluntad de confrontar, pero lo que sí hace es exigir lo que la institucion demanda, más si se trata de un compromiso adquirido hace nada menos que 23 años, que digo yo que ya está bien la espera, aunque como con el Ayuntamiento de Jaén hemos topado, señor rector, parece que si no se buscan fórmulas, que debe haberlas, la obligación contenida en el convenio firmado en su día para hacer posible la llegada de El Corte Inglés, algo ha llovido, puede estar condicionada porque la capital tenga un nuevo Plan General de Ordenación Urbana y esto tardará en llegar, entre otras cosas, además de que como dirían algunos políticos un PGOU no se compra en un supermecado, porque fue Javier Márquez el último alcalde que decidió elaborar el planeamiento urbanístico, ya desde que era concejal de Urbanismo, lo que pasa es que los tribunales, a causa de problemas de entendimiento, donde la Junta de entonces tuvo algo que ver, porque no se contempló legislación medioambiental europea, acabó por anular el documento que tanto cuesta confeccionar, un tremendo jarro de agua fría, y dejó a Jaén sin perspectivas, de hecho durante la etapa de los últimos cuatro años ni se hizo el intento, el alcalde, Julio Millán, tampoco lo consideraba necesario, por más que cuesta creerlo, y nos hemos ido conformando con modificaciones puntuales del Plan existente, que va para las tres décadas. Creo que somos la única capital de provincia andaluza sin un Plan General vigente o al menos en tramitación.

El rector ha dado la voz de alarma por una razón que es fácil de entender, mientras no llegaba el crecimiento real de la superficie de la UJA, la espera podía prolongarse, pero en este preciso momento hace falta suelo y su carencia puede afectar, lo dice el propio Nicolás Ruiz, al futuro que se abre con las expectativas del Cetedex. Es un asunto urgente, una prioridad, y ya que no se hicieron los deberes en tiempo y forma, a los que están ahora al frente del Ayuntamiento les toca actuar con la celeridad debida, aunque no sean los responsables directos del legado, pero aplazar esta obligación, que compromete subsidiariamente al actual equipo de gobierno, representaría un serio revés y de consecuencias incalculables. ¿No queremos tanto a la Universidad de Jaén? Es la hora de demostrarlo.

Conozco el asunto desde el principio, y lo advertí en su momento, cuando empezaron las dilaciones, porque el incumplimiento se ha dado por parte de las sucesivas corporaciones del Ayuntamiento de Jaén, un acuerdo adquirido en el convenio firmado en su día, a tres bandas, entre el propio Ayuntamiento, la Universidad y El Corte Inglés, por el cual, a cambio del traslado de Peritos al Campus y la construcción del citado centro comercial, le correspondía al Consistorio la cesión a la Universidad, para sus planes de expansión, de 130.000 metros cuadrados de terreno, aproximadamente, en las propias inmediaciones del actual Campus de Las Lagunillas, lindante con el centro comercial La Loma y con lo que ya es hoy el Jaén Plaza. A ese acuerdo se llegó hace ¡¡¡23 años!!! y todas las corporaciones y alcaldes se han estado comprometiendo con la UJA, pero en ningún momento se ha llegado a materializar. El asunto, al más puro estilo Jaén, ha seguido los pasos de otros muchos que se encuentran enquistados desde hace tiempo, en algunos casos décadas, sin que se haya encontrado solución.

No me voy a ir muy lejos, prefiero que tengamos más fresca la memoria, aunque he de decir que afecta por igual a alcaldes del PP como del PSOE. Y para mayor abundamiento, el centro comercial de El Corte Inglés y el convenio a tres bandas firmado en su día se hizo estando el Partido Popular al frente del Ayuntamiento, aunque luego fuera el PSOE el que lo inaugurara. Me quedo en el 14 de junio de 2012, por empezar por alguna fecha, una reunión del entonces rector, Manuel Parras, con el alcalde, José Enrique Fernández de Moya, y el concejal de Urbanismo, Javier Márquez, con el compromiso de que en el PGOU aparecerían 127.184 metros para ser cedidos y saldar la deuda del Ayuntamiento con la institución académica. En ese mismo encuentro, el alcalde ofreció reservar suelo municipal a la UJA en el Nuevo Parque Empresarial y en la futura Ciudad Sanitaria. Según veo en esa misma reunión estuvieron presentes los vicerrectores Jorge Delgado y Nicolás Ruiz, hoy rector y entonces vicerrector de Infraestructuras. La idea, como se puede entender, era que la UJA fuera ganando en espacios urbanísticos.Ya en mayo de 2013, en otra reunión, con el PGOU ya decidido, Fernández de Moya aseguró al rector Manuel Parras que le daba “muy buenas noticias”. Palabras del entonces alcalde, que puede representar también lo que a lo largo del tiempo han dicho los demás: “Esta es una apuesta de primer nivel por la educación que hace el Ayuntamiento de Jaén, y al mismo tiempo viene a resolver una deuda histórica”.

Demos un salto a 2021, con la anterior Corporación, un encuentro del alcalde, Julio Millán, con el Consejo Social, en concreto su presidente, Francisco Vañó. El primer edil transmite que va por buen camino la tarea municipal para ceder a la UJA, en este caso ya señala 132.000 metros cuadrados, comprometidos desde la firma del famoso convenio a tres bandas. De aquella reunión salió la idea de acelerar el proceso porque los terrenos eran muy importantes para los planes de expansión de la Universidad. Julio Millán se comprometió a ello para así generar inversión en Jaén. Previamente, en enero de 2020, el mismo alcalde declaró que uno de los temas sobre los que responder en el año era el de la cesión de los terrenos a la UJA, que tampoco fue posible. En agosto del pasado año 2022, es un concejal del PP, Manuel Palomares, el que exige del alcalde, Julio Millán, la entrega a la UJA de los tan famosos terrenos, que se siguen haciendo de rogar, tantos años después. El citado edil lo justificaba en que debido a su localización, junto a La Loma y Jaén Plaza, llevaría aparejado el desarrollo del Plan del SUNP-5, que enlazaría la institución universitaria con ambos espacios que son pilares económicos de la ciudad.

Es verdad que ha habido inconvenientes con los terrenos, pero que en más de veinte años no se hayan podido solventar, y sobre todo, que los alcaldes, todos, fueran tan optimistas, ofrece una pésima impresión. De ahí que entienda que el verdadero interés por la Universidad, de la que todo el mundo, en especial los responsables públicos, quieren hacer bandera, y se les llena la boca, carece de crédito, porque son los hechos los que tienen que hablar y no las palabras y las falsas promesas. No digo nada de los brindis al sol que en alguna oportunidad también han hecho determinados regidores apostando por el casco antiguo para implantar alguna facultad, que únicamente ha servido para el titular de un día de periódico. Parece que ya va siendo hora, con independencia de quien gestione el Ayuntamiento, de cumplir con la Universidad de Jaén. Los convenios están para asumirlos con responsabilidad, el Ayuntamiento, desde el mismo año 2000, al estar dando largas, ha actuado de espaldas al interés de la UJA, no hay más.   

Foto: La Universidad de Jaén demanda, porque los necesita para crecer, los terrenos comprometidos por el Ayuntamiento en un convenio a tres bandas firmado en el año 2000.

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