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A.GARRIDO / El pintor y profesor Francisco Carrillo Rodríguez (Jaén, 1981) ha tenido el atrevimiento de aspirar a ser Hermano Mayor de la Cofradía más emblemática de Jaén, la de Nuestro Jesús, de la que es cofrade. Y por supuesto que es legítimo que se lo proponga, tiene todo el derecho. Con el respeto que merece la otra opción que opta por el mismo cargo, parece relevante el hecho de que nuevas generaciones se acerquen a estos puestos de responsabilidad en el movimiento cofrade, por un lado porque representan una bocanada de aire fresco que le viene muy bien, pero especialmente porque es una forma de asegurar la continuidad de esta tradición tan jienense, hay que seguir reclutando a gente joven para que en su día tome el relevo, y esto es más fácil que lo hagan personas jóvenes, aunque maduras, como es el caso de Carrillo, a quien no le han asustado ni retraído las dificultades que ha tenido que vencer, de hecho está a punto de conseguir sus avales, condición imprescindible para ser oficialmente candidato.

¿Cómo ha surgido su interés por ser Hermano Mayor de la Cofradía más señera de Jaén? Se lo podría preguntar de otra manera, siendo una persona joven, ¿qué hace un señor como usted en una aventura como esta?

Sobre todo surge al ver cómo la Cofradía año tras año sufre una pérdida constante de devotos y cofrades. Desde hace más de una década vengo observando que lejos de tirar del carro de nuestra Semana Santa, vive anclada en tiempos pretéritos, auspiciados por su singularidad, algo que está matando el futuro cercano de la Cofradía. Observar cada año menos nazarenos, me hace pensar que estamos en un momento crítico en cuanto a la devoción. Se ven muy pocos jóvenes que se sientan identificados con la hermandad y eso es latente.

¿Qué percepción tiene de la Cofradía en estos momentos, año 2023 del siglo XXI?

Considero que la Cofradía está mayor en cuanto a sus maneras y formas de integrar el mensaje de lo que actualmente hacen las cofradías. Y hablo desde la percepción de verla desde fuera. Con esto no quiero decir que el trabajo que desarrollan los colaboradores sea ineficaz, sino que vivimos sometidos por unas formas que nos están alejando de nuestro verdadero sentido de hermandad. Se está vendiendo que la Cofradía tiene unas singularidades distintas a otras hermandades y eso no sólo no está funcionando, es que está alejando el futuro de quienes quieren ser parte de la Cofradía. A día de hoy no es atractiva para el futuro. Y con el futuro me refiero a la juventud. Sin ellos esto se acaba en pocos lustros.

Es de suponer que reconoce la labor de quienes, a veces contra viento y marea, han trabajado en favor de la Cofradía y de la devoción a Nuestro Padre Jesús, incluida la persona que ya ha anunciado que será candidata y muy ligada a esta advocación jaenera.

Sin duda, como he dicho anteriormente, las personas que integran la Cofradía actualmente hacen todo lo posible y dan todo lo que saben para el mayor lustre de la hermandad. Pero, quizás, necesitemos un cambio de rumbo que sume y que haga que nuestra Cofradía integre personas capacitadas para los tiempos en los que estamos. Es cuestión de renovarse continuamente ya que como sucede actualmente, muchos de los que ahora están llevan décadas en la Cofradía. Considero que estamos de paso. Cumplimos con unos objetivos y cuando se alcancen, que sean otros los que renueven los hábitos. Sólo así sacaremos lo mejor de cada persona durante un tiempo determinado. El desgaste en la Cofradía es considerable y se deja notar en el trabajo que desde fuera recibimos los cofrades

¿En qué consiste su programa, qué novedades pretende aportar, pero además qué le gusta y qué le desagrada del funcionamiento actual de la Cofradía más popular de Jaén?

El proyecto se centra fundamentalmente en la formación. Y este concepto es muy poliédrico. Y también muy discutible para quienes crean que se quiere cambiar o quitar algo. Lógicamente se ha dado el paso y para ello he tenido que hablar con las personas que considero necesarias para esta «gesta», si se permite la expresión.

El proyecto nace del estudio personal que desde hace más de una década hago de la hermandad. Y se va nutriendo de muchas personas. De ahí que no sea mi proyecto, sino el de muchos cofrades que han aportado su granito de arena y, que desde mi perspectiva, he integrado a la hora de elegir a un equipo con el que poder trabajar. Escucho y hablo con muchas personas que me dan su perspectiva sobre la Cofradía. Y lo que me llamó mucho la atención es que en un 90% de las charlas, las preocupaciones y dudas eran exactamente iguales.

Actualmente hay cosas muy interesantes en la Cofradía, la más importante de todas es el grupo humano que trabaja en ella. Eso es indudable. Pero desde hace mucho tiempo la Cofradía está secuestrada por ideas añejas que nos están haciendo mucho daño. La imagen exterior es más que mejorable.

Se supone que es consciente de que para ser Hermano Mayor el Obispado le va a exigir idoneidad.

Obviamente. Somos conscientes todos los que queremos estar al frente de una Cofradía. Y debe ser transmisible a todos los que integran las hermandades. En cierta medida, los hermanos mayores y gobernadores son guías de muchas personas. Para ello nos preparamos.

¿Qué tal va la recogida de avales, cree que podrá cubrir el objetivo y llegar a las urnas, en la fecha prevista?

Todo va muy bien. Hemos recibido muchos mensajes de cofrades que han querido avalar y sobre todo de quienes consideran que este no es el camino para quienes quieran presentarse. El ejercicio democrático de las cofradías no debería pasar por esto.

Pensábamos que las fechas no eran buenas por el verano y el calor, pero nos han permitido recoger más avales de cofrades que residen fuera y han regresado a su tierra en estas vacaciones.

Si todo va bien, el lunes 17 entregaremos los avales suficientes para poder ser candidatos.

¿Cómo valora lo que es para Jaén la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno y también qué es para usted, quién le transmitió la devoción por la imagen más querida de la ciudad?

La imagen de Jesús es de esas obras de arte que transcienden al alma. Igual que «El descendimiento» de Rogier Van der Weyden o cualquiera de las obras de Bach. Hay algo que traspasa. Y Jesús lo tiene. Y trasciende de padres a hijos. Podré estar o no de acuerdo con algunas cosas que afectan a la imagen, pero en realidad, la talla y su devoción está por encima de cualquier condición estilística. Me gusta así, como está ahora, exento de todo artilugio y abalorio. Me apasiona de lado, de frente, de todas las maneras posibles.

Y ocurre con el pueblo. Lo queremos, porque es él quien soporta nuestras causas. Por estar presente en nuestras oraciones y por ser consuelo hasta para los que no creen. ¡Eso es increíble, pero sucede con Jesús!

La devoción llega y no sabes porqué. A mí me llegó con 9 años en mi primera Madrugá de la mano de mi padre y fue con mi Virgen de los Dolores. Me atrapó y aún sigo prendado de Ella.

Mi padre fue fundamental en este recorrido y antes su madre, mi abuela Juana. Ella es la causante de mis inquietudes.

¿Cómo sería su junta en el caso de concurrir a las elecciones y tener la oportunidad de salir elegido Hermano Mayor?

Pues deberá ser una junta que aúne criterios y que trabaje en el mismo sentido. Heterogénea y preparada. Debe ser cercana, comunicativa y reflexiva. En ningún caso debemos pecar de «presidencialismo».

¿Qué opinión le merece, en general, el movimiento cofrade en Jaén, qué virtudes y qué defectos le encuentra?

Creo que actualmente vivimos un buen momento. En las últimas tres décadas, las Hermandades y Cofradías de Jaén han dado un paso al frente magnífico. Cuando era pequeño, las actos eran contados, y las publicaciones, salvo en alguna cofradía, eran prácticamente inexistentes y los cortejos eran más que mejorables.

Ahora cada vez se trabaja mejor. La formación en los últimos años se ha hecho latente. Además se ha incrementado el patrimonio material y el número de hermandades. La imagen que damos las cofradías actualmente es muy positiva y, a través de sus programas de solidarios, son muchos los ciudadanos que se benefician de la caridad de las hermandades. Algo que dice mucho de nuestro compromiso cristiano.

Ahora bien, creo que abusamos de clichés que no aportan nada. Veo capataces de mi ciudad hablar con un acento poco acertado y alejado de nuestra orientalidad. Nos distinguen muchas cosas y los complejos deben limarse.

El cofrade debe estudiar nuestra historia y centrarse más en los cultos, nuestra asignatura pendiente. Sin ellos todo esto no tiene sentido. Y ahí nos metemos todos. Debemos saber qué tenemos y porqué lo hacemos. Porqué nuestra fe la manifestamos de esta u otra manera. Y ahí la formación es fundamental.

Quizás nos centramos solamente en el atractivo de la procesión y todo lo que la rodea, pero el origen, lo más importante es la Iglesia, el mensaje que ÉL nos dejó. No lo olvidemos.

¿Y qué pasa si esta ilusionante aventura personal y cofrade no prospera?

Pues no pasa absolutamente nada. Es una experiencia tan enriquecedora que como docente y artista me aporta unos matices extraordinarios. Seguiré siendo el mismo y estaré al servicio de mi Cofradía. Todos somos un equipo que debe generar ilusión y grandeza a nuestra Cofradía.

No pierdo nada, al revés. Si con esta aventura cargamos las pilas de la Cofradía y actívamos de nuevo el motor, habrá merecido la pena. Pero seguiremos luchando, que a nadie le quepa la menor duda.

¿Quién es Francisco Carrillo Rodríguez?

Francisco Carrillo Rodríguez (Jaén, 1981) es licenciado en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid, 2008. Profesor de Artes Plásticas y Diseño. Pintor, dibujante tu grabador.

Desde 1998 comenzó a dibujar y a tomar conciencia del noble arte de la pintura. De la mano de su padre, Paco Carrillo (Jaén,1954) se preparó para el ingreso en la facultad de Bellas Artes de Madrid, licenciándose en 2008. En su trayectoria pictórica ha cosechado más de medio centenar de premios nacionales de pintura y dibujo y expuesto en diferentes galerías del territorio nacional, teniendo obra en importantes colecciones públicas y privadas.

En 2013 fundó la Academia de Arte Carrillo, dedicada a la enseñanza del dibujo, la pintura y el grabado.

En lo que respecta a la Semana Santa de Jaén hizo su primer trabajo en el año 2000 para la portada del boletín anual «Estudiantes».  Ha realizado tres carteles de la Semana Santa de Jaén en 2002, 2005 y 2016. También fue autor en 2008 del cartel oficial del Tiempo de Gloria.

Además ha ilustrado númerosos carteles de hermandades de nuestra ciudad como a la Hermandad del Cautivo, los Estudiantes. En 2014 ilustró la portada del boletín de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús «El Abuelo».

Ha realizado también el cartel del 75 aniversario de la Cofradía de la Magdalena, en 2021 y conjuntamente con su padre y su hermano Alberto el tríptico del 75 aniversario de la Cofradía de los Estudiantes.

En la Semana Santa de Jaén ha realizado también el INRI de la cruz de Guía de la Hermandad de los Estudiantes y la pintura del tramo de la Virgen de las Lágrimas. También para la misma cofradía estudiantil, ha realizado dos pinturas para el paso del Santísimo Cristo de las Misericordias. Por último en 2022 se estrenó el Gloria del techo sede palio de la Virgen de la Trinidad de la Cofradía del Cautivo de Jaén.

Es hermano de las cofradías de los Estudiantes, Sepulcro, Cautivo y Nuestro Padre Jesús, todas ellas de la capital jienense.

Foto: Francisco Carrillo Rodríguez aspira a ser Hermano Mayor de la popular Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, de Jaén.

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