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Por ANTONIO GARRIDO / Esta tarde-noche ha tenido lugar en el Teatro Infanta Leonor de la capital, la entrega de los Premios “Jaén, Paraíso Interior” que la Diputación Provincial otorga cada año con motivo del Día Mundial del Turismo, que tuvo lugar el pasado martes. Ha coincidido este año en el que en cada edición se pone en el escaparate la “marca Jaén” con el XXV aniversario de la creación de las distinciones, y es muy grato poder destacar que durante este tiempo la provincia nos ha dado grandes satisfacciones en materia turística y que la relación de premiados es muy numerosa, lo que viene a decir que existe un potencial valioso de personajes y colectivos que suman para hacer de Jaén una provincia de la que podemos sentirnos orgullosos. Esta idea se ha enfatizado en los discursos oficiales de esta noche, que probablemente es mucho lo que queda por hacer, que no hemos tocado techo, que disponemos de una oferta amplísima que abarca a todos los elementos que puede demandar el viajero más exigente, por tanto hay que seguir en la línea que hasta ahora y en lo posible complementar con nuevas apuestas, a sabiendas de que los esfuerzos para situar a Jaén en el mapa de la proyección turística están dando sus frutos, pero se trata de una carrera de obstáculos y el objetivo debe ser llegar más lejos.

Como en ediciones anteriores los Premios “Jaén, Paraíso Interior” del año del XXV aniversario no plantean ningún género de dudas. Dos cocineros estrellas Michelín que proyectan la mejor gastronomía de Jaén, Pedro Sánchez, desde Bagá y Juan Aceituno, desde Dama Juana. Ellos son de los adelantados que han abierto un camino en el que los que vienen detrás lo hacen empujando, por lo que no es de extrañar que en breve plazo otros reconocidos chef obtengan el mismo galardón, en tanto ha crecido el prestigio de la gastronomía jienense que hay razones de peso para aspirar a la candidatura de “Ciudad Creativa Gastronómica de la Unesco”. La cocina de Jaén es una de nuestras grandes fortalezas. Completan la relación de premiados la Asociación Socio Cultural de voluntariado “Iuventa”, que preside un infatigable impulsor del patrimonio de Jaén como es Rafael Cámara Expósito, un ejemplo de compromiso por la ciudad desde la sociedad civil. Entre los distinguidos también se cuenta con el Real Club Tenis de Mesa de Linares, con una amplísima trayectoria deportiva, de más de cuatro décadas y un impresionante palmarés. Y se ha tenido en cuenta, a la hora de conceder los reconocimientos, a la Vía Verde del Aceite, que se considera una atractiva oferta más para el turismo. En este especial aniversario se ha incorporado el acierto de premiar especialmente, ya que estuvo entre los elegidos en el año 2000, a la cantaora Carmen Linares, que ha acudido a esta cita con su espectáculo “40 años de flamenco”, acompañada nada menos que por Juan Valderrama, hijo del emblemático cantaor torrecampeño. Carmen Linares es un icono del flamenco, una de las voces más prestigiosas de las últimas décadas, con una biografía impresionante en la que nunca se ha olvidado de su tierra. Un magnífico cuadro de honor que es un punto y seguido en la relación de grandes que ya han sido “Paraíso Interior”, pero el capital humano y los ejemplos, que los hay y muchos, permitirán que esta nómina siga creciendo.

Es evidente que nadie como la Diputación Provincial realiza una labor de promoción y difusión de la riqueza y los recursos para el turismo, la promoción y el buen nombre de Jaén como el que desarrolla actualmente la Corporación provincial y que es una acción impulsada por sus últimos presidentes. Desde este punto de vista la Diputación es un aliado de excepcional importancia para nuestros intereses en este ámbito de poner a Jaén en el escaparate nacional y extranjero y “vender” sus enormes potencialidades.

Sin tratar de ser excesivamente minuciosos, porque la labor es aún más amplia, sí se puede afirmar con rotundidad que las corporaciones presididas sobre todo por Felipe López y Francisco Reyes han hecho una labor considerable en pro de la “marca Jaén”. Recordemos hace 25 años, en 1997, la creación del lema para la proyección turística de la provincia, el “Jaén, Paraíso Interior”, que se ha convertido en el slogan de referencia y que nos ha abierto muchas puertas.

Pero con el tiempo y con la suficiente visión para ir haciendo aportaciones en las distintas ferias en las que representa a Jaén, ha ido sumando iniciativas a los recursos existentes. Ruta de los Castillos y Batallas; Oleoturismo y Jaén Selección, entre otras apuestas novedosas para colocar en el lugar que corresponde a su excelencia a nuestro aceite de oliva virgen extra, sin olvidarnos de su empeño e impulso a la declaración de los Paisajes del Olivar como Patrimonio Mundial, en cuyo camino se encuentra en este momento; el Viaje al Tiempo de los Iberos, en torno a nuestra riqueza arqueológica; Renacimiento del Sur y Vandelvira, para enfatizar la grandiosidad monumental, empezando por la hermosísima Catedral; Degusta Jaén, como apoyo a los productos agroalimentarios de nuestro territorio; y junto a lo anterior, las actuaciones para engrandecer el hoy Centro Cultural Baños Árabes, que fue reconocido en su día por Europa Nostra; o el Premio Jaén de Piano, y su cada vez mayor prestigio internacional, sin olvidar la recuperación de legados como el de Miguel Hernández, por su vinculación a la provincia, o la programación de Jaén en julio, que pretende dinamizar la provincia en un mes en el que la competencia la tenemos en las playas. La relación no está completa y además no paran de añadir aportaciones, como una que me agrada muy especialmente, dar a conocer a la provincia a través de las huellas de grandes figuras de la literatura, con ocho rutas que se han diseñado y que discurren por el territorio jienense vinculando el patrimonio cultural, monumental y natural a la vida y obra de Jorge Manrique, Santa Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz, Antonio Machado, Federico García Lorca, Miguel Hernández, Antonio Muñoz Molina y Juan Eslava Galán. No es una relación pormenorizada, es simplemente una referencia, pero suficiente para hacerse una idea de una implicación muy sólida con el territorio y todas sus grandes fortalezas.

No se le puede negar a la Diputación que cuando acude a cualquier evento ferial, dentro y fuera de España, en nombre de la provincia de Jaén, lo hace con toda la legitimidad, porque ha sido la primera institución en creerse las potencialidades de la provincia y las ha puesto en el mejor de los escaparates. Gracias a este empeño Jaén es más conocida y su buen paño ya no está en el arca como ocurría hasta no hace mucho tiempo. Pues bien, una de las últimas agradables sorpresas fue la apertura en la capital del nuevo edificio “Jaén Paraíso Interior” en lo que fue sede de Banesto, en pleno centro, calle Roldán y Marín, que la institución adquirió en 2017 para tener en la ciudad un gran escaparate del turismo provincial, un denominado centro de dinamización turística que cuenta con todos los medios para ser el buque insignia desde donde visibilizar y potenciar la rica, variada y singular oferta provincial. Cualquier visitante puede desde estas modernas dependencias asomarse al gran balcón de la provincia, con novedades como la posibilidad de consultar toda la información, utilizar recursos como una zona de visión de 360º de paisajes del Santo Reino o un espacio en croma en el que realizarse fotos con fondos de diferentes rincones jienenses. Un recurso extraordinario que complementa todo el camino ya recorrido por la institución provincial y que, además, ha permitido recuperar una edificación genuina de Jaén. En resumidas cuentas, estamos en el camino. No se puede desfallecer, porque el turismo no solo aumenta la imagen y la autoestima de Jaén y su provincia, es asimismo una activo económico cada vez más considerable.

Es obvio que el impulso principal es de la Diputación, pero poco o nada podría hacer en solitario. Hay cada vez más empresarios implicados, que modernizan sus establecimientos, en especial los hoteleros, que amplían la oferta, que realizan inversiones y que crean mucho empleo. Son el motor imprescindible para que la maquinaria esté engrasada. En este momento que hay al frente de la Delegación de Turismo un político procedente del sector privado, José Ayala, con negocios radicados en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas, aumentan las expectativas para un mayor compromiso, y que la Junta vaya asumiendo, cada vez más, un papel protagonista, que trascienda a ferias como Fitur para desplegar medios y oportunidades. Por cierto, me pregunto qué fue del Plan Turístico de Grandes Ciudades por importe de 500.000 euros “para impulsar la excelencia”, firmado en diciembre de 2020 por el entonces vicepresidente de la Junta, Juan Marín, y el alcalde, Julio Millán. Se divulgó a bombo y platillo, pero quien suscribe no ha vuelto a tener noticia, igual me he perdido algo. Pero hoy es un día para celebrar y dar al turismo el valor que tiene para seguir proyectando a la provincia, con permiso de las comunicaciones, que constituyen la asignatura pendiente.

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Foto: La artista Carmen Linares ha recibido un premio especial con motivo del XXV aniversario de la marca «Jaén, Paraíso Interior».

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