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BUENOS DÍAS. Por ANTONIO GARRIDO / “Una gota de pura valentía vale más que un océano cobarde” (Miguel Hernández). Frase de uno de nuestros poetas de cabecera, jienense de adopción porque aquí descansa gran parte de su obra. Esta cita inicial que recoge Hernández en Viento del pueblo nos alerta de que la valentía es una gran fortaleza, en cambio la cobardía no conduce más que a la crueldad…Rescatamos también en este miércoles a Octavio Paz, cuya obra ha sido tan prolífica, y ha abordado multitud de campos, entre ellos la política. “La libertad, para realizarse –escribió– debe bajar a la tierra y encarnar entre los hombres. No le hacen falta alas, sino raíces”. Y una temática también preferente en su poesía es el amor, suya es esta expresión tan hermosa: “Un mundo nace cuando dos se besan”, o esta otra: “Bajo las rotas columnas, entre la nada y el sueño, cruzan mis horas insomnes las sílabas de tu nombre”…En las efemérides del día registramos el fallecimiento en 1867 del poeta francés Charles Baudelaire, al que Paul Verlaine incluyó entre los poetas malditos de la Francia del siglo XIX, debido a su vida bohemia y a la visión del mal que impregna su obra. Su libro Las flores del mal es considerado uno de los más revolucionarios y provocadores en su tiempo. Es un libro que proclama una belleza diferente, a veces perturbadora. Canta a lo efímero, lo que se descompone, a lo urbano y sus habitantes anónimos, a la moral ambigua que se pregunta por el remordimiento y a todo lo marginado y lo tabú. Dejó un rico legado de sentencias, como estas: “No hay trabajo más largo que aquel que no nos atrevemos a empezar. Se convierte en pesadilla”, “El más irreparable de los vicios es hacer el mal por necedad” y esta visión poética: “Tú contienes en tu mirada el ocaso y la aurora; tú esparces perfumes como una tarde tempestuosa; tus besos son un filtro y tu boca un ánfora que tornan al héroe flojo y al niño valiente”…También un 31 de agosto, más reciente, en 1997, fallecía en un trágico accidente Diana de Gales, Lady Diana, en plena juventud. Estas frases son de la princesa que fue un mito para la cultura británica: “La vida es solo un viaje”, “El mayor problema en el mundo de hoy es la intolerancia” y “La mayor dolencia que el mundo sufre actualmente es el mal de la falta de amor”…Una reflexión del Papa Francisco: «Al mundo de hoy le falta llorar, lloran los marginados, lloran los que son dejados de lado, lloran los despreciados, pero aquellos que llevamos una vida más o menos sin necesidades no sabemos llorar». Viene a cuento esta frase hoy que se celebra el Día Mundial de la Solidaridad Humana y no quiero que nos pase desapercibido. Ser solidario no solamente nos hace comprometernos con las situaciones difíciles que viven muchas personas, sino que es algo que para que sea pleno, nos tiene que llenar personalmente, producirnos bienestar físico y psíquico. Definamos en parte la solidaridad en base a las siguientes sentencias. El poeta griego Homero dice: “Llevadera es la labor cuando muchos comparten la fatiga”. El escritor Charles Dickens contempla la solidaridad de esta manera: “Nadie que haya aliviado el peso de sus semejantes habrá fracasado en este mundo”. La poetisa Gioconda Belli afirma con rotundidad: “La solidaridad es la ternura de los pueblos”. En tanto que la leyenda del cine, Audrey Hepburn, como último ejemplo, lo retrata de esta preciosa manera: “Con el tiempo y la madurez descubres que tienes dos manos, una para ayudarte a ti, y otra para ayudar a los demás”. Momento asimismo para rendir homenaje a tantas organizaciones y personas, empezando por nuestro ámbito más cercano, que dedican sus recursos y su tiempo en favor de quienes lo necesitan y nos dan un precioso ejemplo. Lo diré con palabras del gran humanista Gregorio Marañón: “No sabrás todo lo que valgo hasta que no pueda ser junto a ti todo lo que soy”…El final se lo he dejado hoy al siempre admirado Benedetti: “De eso se trata, de coincidir con gente que te haga ver cosas que tú no ves. Que te enseñen a mirar con otros ojos”.

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