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Polémicas aparte en el seno del organismo provincial en relación con el consenso que debe presidir la concesión de los Premios Provincia, no queremos dejar de pasar la oportunidad, aunque sea a toro pasado, para felicitar a los cuatro distinguidos. Al ver la fotografía de los premiados choca un poco no ver ninguna imagen de mujer, de las tantísimas que hay destacando en numerosas facetas. Resulta chocante que en estos días se ha hablado de igualdad en todos los foros y estamentos y la Corporación Provincial haya pasado de largo, se supone que sin haberlo pretendido, pero en este tipo de cosas es donde se percibe la sensibilidad, sobre todo cuando hay cientos de mujeres con méritos acreditados para recibir el reconocimiento de la provincia en la que nacieron.

Dicho esto tenemos que dejar claro que en absoluto pierden crédito ninguno de los cuatro Premios de la Provincia de este año, que han sido Raphael, la Universidad de Jaén, el abogado Manuel Medina y el grupo empresarial Luis Piña. Nos vamos a referir a cada uno de ellos.

Me llama poderosamente la atención en primer lugar el caso de Raphael, que mantiene desde siempre una estrecha relación con la provincia en general y con su Linares natal en particular. Se trata de un artista con una agenda apretadísima, pero que siempre está dispuesto a acudir a su tierra para recibir reconocimientos, y ya lo ha hecho en distintas oportunidades, o para sumarse a causas sociales y solidarias. Raphael es profeta en su tierra y nos alegra que el gran artista no haya seguido la senda de otros paisanos famosos que son más reacios a atender las peticiones que se le cursan. En la provincia a Raphael se le ve siempre relajado y satisfecho. En este viaje y a pesar de que no fueron demasiadas horas, ha tenido oportunidad de hablar con mucha gente, aunque a mi juicio lo más importante, además de recibir orgulloso el Premio de la Provincia, fue el de acudir a dedicar su cariño a los chicos de la asociación Pídeme la luna, que por este gesto le van a estar eternamente agradecidos. Nosotros estamos orgullosos de Raphael porque el de Linares nunca defrauda, está plenamente identificado con sus orígenes y de vez en cuando nos da sobre ello una hermosa lección.

Que el Premio Provincia se lo conceda la Diputación a la Universidad de Jaén es un síntoma de que hay excelente armonía entre las dos instituciones, como en realidad siempre ha ocurrido desde el nacimiento de la UJA va a hacer 24 años. La Diputación, que tuvo un papel esencial en el antiguo Colegio Universitario “Santo Reino”, ha sido en todo momento la mejor aliada de la institución universitaria y siguen actuando conjuntamente en muchos proyectos. Entiendo que la Corporación Provincial y sus presidentes, entre ellos el actual, Francisco Reyes, han entendido el papel que corresponde a la principal empresa de la provincia en el despegue que necesita Jaén. Aún es pronto para reclamar resultados, pero el futuro de la provincia no puede ser el mismo sin la Universidad que con ella. Pienso, y siempre lo he defendido así, que es la última esperanza, para el cambio mental y material que Jaén necesita.

Me sumo asimismo al reconocimiento que se ha hecho al abogado Manuel Medina González, cabeza visible del bufete Medina Cuadros, hoy presente en diversas ciudades del país y también en el extranjero. Representa el triunfo de un villanovense valiente, arriesgado, trabajador, emprendedor, que se fue creando una carrera hasta llegar a la cima, con una personalidad desbordante y con una trayectoria en la que ha hecho grandes cosas, la primera unirse en matrimonio a su gran compañera Amelia Cuadros y como consecuencia crear una gran familia. Pero juntos han sido capaces de conformar un grupo profesional sólido y Manuel Medina, en concreto, ha tenido tiempo para desarrollar la creación literaria a través de varios libros en los que ha reflejado su inquietud y talento. Es una de esas personas que pueden ponerse de ejemplo de que cuando se quiere se puede, con constancia, trabajo y valor. Enhorabuena.

Y el cuarto de los premios ha sido para el grupo Luis Piña. O el trabajo liderado por un empresario que apostó hace treinta años por desarrollar una empresa de distribución de gran consumo, ubicada en Andújar, desde donde ha dirigido una estrategia de expansión y de creación de empleo, centenares de puestos de trabajo. que constituyen un ejemplo en la provincia y merecedor de que sea reconocido y sirva de ejemplo.

En resumen, está muy bien conceder este tipo de premios que ayudan a la sociedad jienense a visibilizar situaciones que además de premiadas deben ser conocidas.

 

 

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