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No tenía demasiado interés, por ahora, en volver a tratar sobre el tranvía de Jaén que duerme en cocheras desde hace seis años mientras se sigue sin resolver la posibilidad de su posible explotación. La última noticia que se ha conocido al respecto, es que el Ayuntamiento iba a licitar los trabajos para conocer el estado real de la infraestructura, una vez más…paso previo a cualquier solución, si es que se produce. Al margen de lo anterior, que es de estos últimos días, lo que ya se conocía respecto a un posible entendimiento entre la Junta y el Ayuntamiento es que no se han movido las posiciones, en el sentido de que el gobierno andaluz está dispuesto a colaborar con los gastos derivados de la puesta a punto del sistema tranviario, aunque el consejero de Fomento y Vivienda, el jienense Felipe López, ya dejó claro, por si alguien le había entendido mal, que no iba a asumir en solitario dicho gasto.

Por tanto si se quiere poner en marcha el tranvía el Ayuntamiento está obligado a mojarse, y es complicado por su situación económica, pero estos días he visto el funcionamiento del tranvía de Sevilla, al que veo bastante bien, y en concreto su explotación publicitaria, y es un modelo a seguir. Ya sé que las situaciones no son homologables, pero también se debe contar con la imaginación.

Lo cierto es que la Junta de Andalucía ha reiterado el compromiso para financiar el 40 por 100 del déficit de explotación del tranvía de Jaén, y en esa oferta se ha mostrado la Consejería inamovible. De nuevo insisto en que no quiero establecer paralelismos, pero me encuentro ayer en la portada de un periódico malagueño con el siguiente titular: “La Junta pagará casi 12 euros por cada viajero que suba al Metro hasta 2019”, y, salvando las distancias, reitero, me pongo a pensar en que una de las obligaciones de la Junta, al menos eso creo, es favorecer el equilibrio territorial, y todo el mundo sabe que Málaga avanza como una locomotora, mientras Jaén sigue hundida en el pozo y sin expectativas de desarrollo. Y supongo que entre el 40% comprometido a Jaén y la oferta para Málaga, hay alguna diferencia importante a favor de la capital de la Costa del Sol. Pregunto, ¿no debería la Junta tener en consideración esta realidad a la hora de apoyar la puesta en marcha de infraestructuras como es en este caso el sistema tranviario? Imagino que el partido Ciudadanos, con Juan Marín y Raquel Morales a la cabeza, que se han comprometido con que el tranvía de Jaén salga este año de su atolladero, tomarán nota de la disposición de la Junta para con el metro de Málaga, que seguramente es lo que conviene, y se plantee en Jaén apuestas de parecida dimensión, ya que todos somos andaluces, aunque estemos en territorios diferentes.

Insisto en que todo debe tener su explicación, yo solamente reflexiono sobre una realidad que ésta sí es verdad que no admite duda de ninguna clase. Málaga es una ciudad muy bien tratada por la Junta de Andalucía, que ha experimentado un cambio espectacular, reconocido por todo el mundo. Jaén es una ciudad que tiene mucho que reprocharle al gobierno andaluz, porque se muestra mezquino y lo que da lo ofrece con cuentagotas, y no es la Junta un agente que esté provocando el desarrollo jienense, todo lo contrario.

Esto es lo que me sugiere el recorte de prensa y una opinión que pienso se comparte ampliamente. Pues claro que todos somos andaluces, pero que hay varias andalucías en función de sus velocidades, esto sí es verdad que no tiene la menor discusión, ya me gustaría poder reconocer otra realidad.

 

 

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