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Por ANTONIO GARRIDO / Empecemos por el principio. Como cada primero de mes hoy se han dado a conocer por parte del Ministerio de Trabajo los datos del paro registrado en el pasado mes de marzo. El sector servicios con la Semana Santa ha vuelto a salvar los obstáculos, de todas maneras somos la provincia andaluza en la que se ha producido la menor caída en los datos, 283 desempleados menos, y nos situamos en el global de 42.829 parados. No tiene una significación especial, salvo que seguimos instalados en zona de peligro, y para más inri siguen a la baja los cotizantes a la Seguridad Social, por encima de las mil personas, que es un indicativo, la prueba del 9, de que el mercado laboral sigue en su estancamiento permanente. En cuanto a los porcentajes de parados, baste decir que una vez más son las mujeres las más afectadas por el desempleo, es decir, de ese total de 42.829 personas, el 65,4% se trata de paro femenino. Ha pasado hace poco el Día de la Mujer y he escuchado más bien poco este clamor. Vale que el SOS sea la violencia de género, por supuesto, pero acto seguido la principal lacra no es otra que la falta de empleo.  

En una coyuntura nacional más favorable y en Andalucía con un peor pronóstico pero con oscilaciones a favor y en contra, los famosos ciclos, no nos pueden satisfacer argumentos como que se ha mejorado el comportamiento interanual. Es verdad que los registros son mejores que los del año pasado por estas fechas, y si nos remitimos a tiempos atrás podríamos seguir con lecturas triunfalistas, las que suelen hacer con frecuencia los políticos que se sienten concernidos y que cuando se pronuncian es o para colgarse alguna medalla o para culpar al adversario de todos los males, está por ver que alguna vez haya un político serio que asuma su responsabilidad o la parte que le corresponda. Lo normal, desde que el mundo es mundo, es que todos vayan a la defensiva en lugar de actuar con una ofensiva enérgica. Lo peor es que esta situación que viene de largo no les pasa factura a las formas de gobernar de unos y de otros, seguramente porque no hay más ciego que el que no quiere ver. Qué falta está la política de Jaén de ideas renovadoras, de cambios de talante y de remangarse ante la adversidad en lugar de estar durante décadas manejando el mismo discurso que produce resignación y hartazgo. Entre unos y otros, y con el panorama social y económico que nos distingue, aviados estamos. Lo podemos decir de otra manera para que se entienda bien. El paro no es la mejor tarjeta de visita de Jaén, sus problemas son crónicos, las mejoras que expresan los datos oficiales me temo que están al menos precocinadas, sobre este asunto hay mucho que discutir porque la realidad del mercado laboral y el sentido común nos interpelan, pero nos sigue dando la impresión de que hay políticos y con responsabilidades muy directas sobre el territorio, que parece que lo único que les preocupa es pasar la hoja del calendario y hasta el suplicio del mes que viene. Así llevamos décadas y décadas, cambia el panorama, pero no el modelo.

En los asuntos ciudadanos tras las lluvias de los últimos días supimos que las instalaciones deportivas de La Salobreja se veían afectadas y se actuaba de urgencia, llueve sobre mojado. Hace unos días en el pleno se presentaba una moción de Jaén Merece Más demandando respuesta urgente, pero no es la primera vez que surge esta inquietud, porque el complejo de La Salobreja se ha quedado plenamente obsoleto y si no se actúa de manera urgente nos puede causar más de un disgusto. A grandes males, grandes remedios. Todos sabemos que La Salobreja fue una gran conquista en su tiempo y ha prestado un excelente servicio a la práctica deportiva, pero por más que se pretenda requieren una apuesta por nuevas instalaciones deportivas. No se trata de efectuar obras sobre lo existente, porque al final lo barato es caro, se trata de implicar a las administraciones para construir un nuevo complejo moderno, adaptado a las nuevas circunstancias y necesidades, y esto hay que hacerlo YA. Si La Salobreja es una obra que data de la mitad de los años 70, debe ir para medio siglo, Las Fuentezuelas es una infraestructura más moderna, de lo poco que logró conseguir la capital con motivo de los fastos del 92 en Sevilla, junto con el Darymelia, y costó lo suyo, donde otras provincias lograron importantes obras y a nosotros nos conformaron con una parte mínima de la tarta encargada por el gobierno andaluz de entonces, como siempre de espaldas a Jaén.

Fue aquella oportunidad histórica en la que se nos negó el AVE, al menos que nos pasara más cerca, y nos conformaron con una exposición sobre el Renacimiento, muy buena por cierto, pero de la que nunca más se supo. Lo dicho, que la Junta se implique como finalmente se logró que interviniera aportando la mitad del Olivo Arena, y por supuesto que se soliciten las aportaciones que corresponda al Gobierno de España mediante el Ministerio correspondiente.

En materia política, lo más llamativo es la convocatoria que ha hecho el Partido Popular para celebrar en mayo su Intermunicipal en la población de Villacarrillo. Ya tienen confirmada la presencia de Elías Bendodo, en su calidad de vicesecretario de Política Autonómica y Municipal del PP. Erik Domínguez, un presidente que manda y que lidera, ha explicado a su sanedrín la hoja de ruta y no se mueve ni un milímetro de su objetivo que al tiempo constituye obsesión: “Sumar (es obvio que se refiere a reforzar y no al partido de Yolanda Díaz) es lo que nos hará ganar la Diputación, un reto al que no renunciamos por el futuro de los jienenses”. Es de suponer que Erik Domínguez tendrá pensado por dónde se presentará cuando lleguen las próximas elecciones municipales de 2027, porque volver a las listas de Jaén capital sería cantoso, pero aquí estamos para no sorprendernos.

Eso sí, todo hace indicar que hay presidente para rato y que con él al frente el partido vive un momento de normalidad y ausencia de tensiones internas, a lo que colabora el panorama propiciado por las últimas citas electorales y, sobre todo, su presencia en importantes alcaldías de la provincia, entre ellas Jaén, Linares, Andújar, Alcalá o La Carolina. Domínguez está envalentonado, es listo, locuaz, habla hasta por los codos y con una fluidez apabullante, le oigo en entrevistas radiofónicas y me cuesta seguirlo, y hoy por hoy manda y es respetado. ¿La Diputación? En este momento procesal puede parecer difícil, imposible no lo es, y existe una certeza, la acción de gobierno quema mucho más que la de la oposición, claro que esta Diputación, con el mismo color que la que llegó en 1979, va para 45 años en el ejercicio del poder supramunicipal, que se dice pronto, eso sí, por decisión de los votos, alguna vez tendrá que ceder el testigo. Nada es eterno y la alternancia es un valor democrático en sí mismo. En resumidas cuentas, que nadie le podrá acusar a Erik Domínguez de no tomarse su tiempo o de rendirse o resignarse. El futuro siempre se ha dicho que es de los valientes. Con permiso de Reyes, que si bien todo hace indicar que es su último mandato, puede pasarle lo que a Xavi Hernández, el míster del Barça, que los éxitos, por ejemplo el Cetedex que va a velocidad de crucero, junto a un buen estado de salud, le animen a seguir, y ahí ya sería un verdadero duelo de titanes. Emulando al gran Bertolt Brecht o a la versión de Golpes Bajos, aunque dando la vuelta a su archiconocida frase, buenos tiempos para la lírica…política.

Por último, novedades con respecto a la situación sanitaria, pero no en Sebastopol, sino en Jaén. Vamos de mal en peor, esta mañana el PSOE denunciaba lo que en los últimos tiempos es un secreto a voces, la disminución radical de las intervenciones quirúrgicas, los quirófanos vacíos, dice la Junta que debido a la falta de anestesistas, que es un buen motivo, pero la situación lleva demasiado tiempo y el panorama no tiene visos de mejorar sino de empeorar. Supongo que algo hay que hacer, además de lamentarse. Jaén Merece Más se remite a su acuerdo de gobierno y exige, reacciona raudo y veloz, la declaración por la Junta de puestos de difícil cobertura para los sanitarios en la provincia. Es curioso que al gobierno de Juanma Moreno apenas le pasa factura, a juzgar por las encuestas, la crisis sanitaria que se mantiene en vilo y no es cosa de ayer ni de hace un año, sólo unos cuantos colectivos, pocos, mantienen alerta la exigencia y la reivindicación, pero en otras situaciones un problema de esta envergadura, y que no afecta únicamente a los tratamientos quirúrgicos, hubiera sido de consecuencias letales. Al ejecutivo de Juanma Moreno, aún en edad de merecer, parece que se le perdona todo, pero aviso a navegantes, a la consejera, al presidente del PP, al conjunto de la dirigencia, lo normal es que la capacidad de aguante tenga un límite. La joya de la corona está ahora en Cuidados Intensivos.

Foto: Erik Domínguez, presidente provincial del Partido Popular de Jaén.

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