“Siempre he dicho que el ocio ablanda el espíritu. Hay que mantener el cerebro ocupado. Y si no se tiene cerebro, al menos las manos”

BUENOS DÍAS. Por ANTONIO GARRIDO / “Siempre he dicho que el ocio ablanda el espíritu. Hay que mantener el cerebro ocupado. Y si no se tiene cerebro, al menos las manos” (Carlos Ruiz Zafón). Esta frase está sacada de El juego del Ángel, novela de este escritor barcelonés, fallecido en junio de 2020 en Estados Unidos, a los 56 años, autor de éxito, que ganó el Premio Planeta con La sombra del viento. El mensaje es muy sencillo y se relaciona con nuestra salud física y psíquica, hay que mantenerse siempre en forma, tenemos que atender debidamente la vocación y la devoción, el caso es que nuestro disco duro no pare de funcionar. Ya lo dijo Hipócrates, el llamado padre de la medicina: “Los hombres deberían saber que del cerebro y nada más que del cerebro vienen las alegrías, el placer, la risa, el ocio, las penas, el dolor, el abatimiento y las lamentaciones”. Ahí se esconde el gran secreto, nuestro destino, y volviendo de nuevo a Ruiz Zafón, “el destino no hace visitas a domicilio, hay que ir a por él”…Por lo demás tal día como hoy de 1885 nacía Dino Campana, uno de los poetas más importantes del novecento italiano, considerado el único poeta maldito italiano debido a la sombra trágica que cubrió su vida bajo el signo de la locura. Cantos órficos es su única obra publicada en vida, libro imprescindible para los nuevos líricos italianos que surgieron después y sobre todo para los poetas del hermetismo. De él se ha escrito: «La prosa de Campana es pura poesía, pura y disonante como bronce de campana, como el rocío de la noche, agujero negro que chupa su espíritu tan necesitado de ser recorrido, como enfermo, como persona, como poeta”. Un verso de Campana: “La humosa tarde de verano/desde el alto ventanal vierte claridad en la sombra/y me deja en el corazón una seña ardiente”…Otro autor ligado a esta fecha es el escritor y dramaturgo belga Maurice Maeterlinck (20 de agosto de 1862), que abandonó el naturalismo y el parnasianismo para dedicarse a la poesía alegórica en la que la imagen recordó la iconografía medieval. Su obra se caracterizó por un estilo claro y sencillo para expresar ideas y emociones, lo que le valió el Premio Nobel de Literatura en 1911. Estas frases son de su autoría: “No hay vidas pequeñas: cuando la miramos de cerca, toda vida es grande” y “El silencio es el sol que madura las frutas del alma. No podemos tener una idea exacta del que jamás se calla”…Otro nombre que añadir es el de Howard Philips Lovecraft (20 de agosto de 1890), innovador novelista estadounidense de novelas y relatos de terror y ciencia ficción, uno de los más populares escritores de cuentos de terror, al que aportó una mitología propia, los Mitos de Cthulhu. Dos expresiones suyas: “La emoción más antigua y más intensa de la humanidad es el miedo, y el más antiguo y más intenso de los miedos es el miedo a lo desconocido”, que subraya la existencia del miedo como una sensación atávica, en tanto que en la frase “Me sentí en el borde del mundo; mirando por encima del borde en un caos insondable de la noche eterna”, advierte que en los límites de lo razonable aparece una sensación de vértigo…El último personaje literario seleccionado para hoy es el del poeta italiano Salvatore Quasimodo (20 de agosto de 1901), uno de los grandes de la literatura universal, Premio Nobel de Literatura en el año 1959 “por sus poemas que con ardor clásico expresan el sentimiento de la vida de nuestro tiempo”, un autor que siempre defendió el papel del poeta y de la poesía en la sociedad. Dos testimonios para entenderlo mejor: “Y aquel arrojarme a la tierra, aquel gritar alto el nombre en el silencio, era dulzura de sentirme vivo” y “Un poco de sol, un estrellón de ángel, y luego la niebla; y los árboles, y nosotros hechos de aire en la mañana”…Como final, una cita del escritor y filósofo de la Ilustración, Jean Jacques Rousseau: “Donde quiera que veáis la moderación sin tristeza, la concordia sin esclavitud, la abundancia sin profusión, decid confiadamente: es un ser venturoso el que aquí manda”.