BUENOS DÍAS. Por ANTONIO GARRIDO / “Cuando lleguemos a ese río, cruzaremos ese puente” (Julio César). Esta frase célebre, una de las más conocidas del emperador romano, ejemplifica de manera sencilla la necesidad que tenemos de aprender a vivir el momento presente, carpe diem. Ante algunas situaciones, conflictivas o no, tendemos a adelantarnos a los acontecimientos sin darnos cuenta de que tal vez existen alternativas y sufrimos la carga emocional de afrontar hechos que ni siquiera existen. Por nuestro propio bien no es bueno anticipar los problemas ni vivir en el futuro, al menos excesivamente, lo que no quiere decir que no se tengan planes, por si acaso. Cuando lleguemos al río entonces será el momento de ver de qué manera se cruza el puente, el consejo es no ponernos el parche antes de que salga el grano…Entrando en los personajes del día el primero escogido es Edward Bulwer Lytton, novelista, dramaturgo y político británico, nacido tal día como hoy de 1803, autor de Los últimos días de Pompeya, quien fue célebre en su tiempo al acuñar frases como “la pluma es más fuerte que la espada” o “era una oscura y tormentosa noche…” Autor de relatos macabros, como la novela Zanoni, de él dijo el escritor H.P. Lovecraft que tenía una habilidad especial para tejer una cierta clase de singular encantamiento. Dos expresiones suyas: “El destino se ríe de las probabilidades” y “Es muy probable que nadie aprenda nada en absoluto, a menos que primero aprenda humildad”…En el mismo día y año, nació el escritor, filósofo y poeta estadounidense Ralph Waldo Emerson, que dirigió el movimiento trascendentalista de mediados del siglo XIX con unas enseñanzas que contribuyeron al desarrollo del llamado Nuevo Pensamiento. Un discurso pronunciado por Emerson en el año 1837 llegó a considerarse como la “Declaración de Independencia intelectual de los Estados Unidos”. Estos mensajes son suyos: “La tristeza mira hacia atrás, la preocupación mira alrededor, la fe mira hacia arriba” y “No ha aprendido las lecciones de la vida quien diariamente no ha vencido algún temor”…En 1925, también un 25 de mayo, venía al mundo, la escritora y diplomática mexicana Rosario Castellanos, una de las figuras más importantes del siglo XX que con su obra El eterno femenino apuntalaba sus principios feministas. Esta autora consideraba la poesía “un intento de llegar a la raíz de los objetos”. Dos frases de las más inspiradas: “Feliz de ser quien soy, solo una gran mirada: ojos de par en par y manos despojadas” y “Matamos lo que amamos. Lo demás no ha estado vivo nunca”…El dramaturgo y poeta español, figura importante del Siglo de Oro de la literatura, Pedro Calderón de la Barca, está asimismo relacionado con este día, ya que falleció en 1681. Su producción literaria en la que figuran títulos tan conocidos como La vida es sueño, El médico de su honra, El alcalde de Zalamea, El gran teatro del mundo, etc., consta de 110 comedias, 80 autos sacramentales, loas, entremeses y otras obras menores. Su personaje más universal es el Segismundo, de La vida es sueño, considerada como la cumbre del teatro calderoniano. ¿Quién no conoce esta cita?: “¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción, y el mayor bien es pequeño, que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son” y esta otra frase: “Afortunado el hombre que tiene tiempo para esperar”…Una sentencia de Martin Luther King: “Si no puedes volar, corre; si no puedes correr, camina; si no puedes caminar, gatea. Sin importar lo que hagas, sigue avanzando hacia adelante”…Merece un recuerdo el escritor Thomas S. Eliot, que representó una de las cumbres de la poesía en lengua inglesa del siglo XX y fue Premio Nobel de Literatura. Suya es esta frase: “La mayor parte de los problemas del mundo se deben a la gente que quiere ser importante”…También en este día rescatamos al filósofo alemán Martin Heidegger, uno de los imprescindibles de su tiempo, que dejó notables sentencias, como estas: “Todo lo grande está en medio de la tempestad”, que nos recuerda que no hay triunfo sin sacrificio, y “La gran tragedia del mundo es que no cultiva la memoria, y por tanto olvida a los maestros”, en el sentido de que olvidar el pasado nos condena a cometer errores una y otra vez…Cómo no rendir homenaje al celebrado escritor japonés Haruki Murakami, al que se le acaba de conceder el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2023. Este autor se hizo célebre a partir de su primera novela, Escucha la canción del viento y es autor de obras como Tokio Blues o 1Q84. Su estilo inusual ha sido llamado “misterioso y surrealista” pero es un grandísimo escritor, que no ha sido tocado aún con el Nobel de Literatura, aunque ha estado varias veces nominado. Suyas son estas citas: “A mi parecer, ciertos sistemas de pensamiento son tan parciales y tan simples que se vuelven irrebatibles”, “Tiempo y libertad son lo más importante que el dinero puede comprar para el ser humano” y “Cada día, al llegar la hora, anochece. Pero el mundo ya no es el mismo que el día anterior. Tú, no eres el mismo que ayer”, aunque sobre todo me gusta sobremanera este mensaje: «Cerrar los ojos…no va a cambiar nada. Nadie va a desaparecer simplemente por no ver lo que está pasando. De hecho, las cosas serán peor la próxima vez que los abras. Sólo un cobarde cierra los ojos. Cerrar los ojos y taparse los oídos no va a hacer que el tiempo se detenga». Grande Murakami…El día se nubla con la desaparición de una gran estrella del firmamento musical, la grandísima Tina Turner, que acaba de fallecer a los 83 años de edad. Esta cantante suiza de origen estadounidense, considerada la reina del rock and roll es simplemente una de las mejores artistas de la historia en su polifacética condición de cantante, compositora, bailarina, actriz y coreógrafa. Se hizo mundialmente conocida por su tema «Simply the Best» (Simplemente la mejor) y además de toda su carrera fue un ser humano que dedicó su vida a forjar sueños y libertad. El homenaje va implícito en estas dos sentencias suyas: «El secreto de mi música es sentir emociones» y «Esto es lo que quiero en el cielo…palabras que se conviertan en notas para que las conversaciones sean sinfonías». Hasta siempre…Y la cita final, esta vez de la escritora que fuera compañera inseparable de Juan Ramón Jiménez, se trata de Zanobia Camprubí, que nos dejó este precioso legado: “Mientras más vivo, más creo en la sencillez”…