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Por ANTONIO GARRIDO / La llegada del hasta ahora consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, a la presidencia del Parlamento andaluz, es más que probable que haga moverse el escalafón, de hecho durante la pasada campaña, como si los más informados dentro del partido conocieran los planes del presidente Juanma Moreno, dejaron caer dos nombres que me merecen crédito cualquiera de ellos para llevar las riendas de la citada Consejería, y no son otros que Catalina García, que ha sido la número dos en la candidatura de Jaén al Parlamento andaluz, viceconsejera en la anterior etapa, competente y dispuesta, y José Antonio Miranda, hasta ahora director general de Gestión Económica y Servicios del SAS, pero sobre todo un activo que donde esté lo hará bien, aunque creo que ya es hora de que le den el sitio que se merece por su propia gestión.

La presencia de estos dos embajadores jienenses en una Consejería tan esencial desde muchos puntos de vista se vería con agrado en la provincia, sobre todo teniendo en cuenta que estos próximos cuatro años van a ser vitales para el desarrollo del proyecto de la Ciudad Sanitaria, cuyas obras deberán comenzar en el próximo año 2023 si culminan todos los trámites y una vez que Ayuntamiento y Diputación, en modélica colaboración, procedieron en su día a la cesión de los terrenos. Hay un cronograma de actuaciones y un anteproyecto que tiene muy buena pinta y nadie mejor que gente, quiero decir, políticos de Jaén, para darle el impulso para que esta infraestructura sanitaria se haga realidad lo más pronto posible, porque el futuro gran hospital de referencia es el gran complemento que van a precisar los alumnos de Medicina, cuyo grado, como todo el mundo conoce, se empieza a implantar en el inminente curso académico en nuestra Universidad de Jaén.

La Ciudad Sanitaria ha sido un proyecto del Partido Popular y ahora, que el gobierno está en sus exclusivas manos, se trata de ver cómo actúa sobre una vieja aspiración. Baste decir que el primero en reivindicarla fue el entonces presidente del Colegio de Médicos, Antonio Luna Fantony, que algo ha llovido. En un momento determinado el PSOE hizo suya esta demanda, pero la frenó con la crisis de 2008, pero al tiempo se fueron construyendo otros hospitales en la comunidad. El PP lo convirtió en prioridad de su anterior campaña, en 2018, y en estos años ha habido que hacer todo el trabajo previo porque no había nada, y en él quien verdaderamente ha bregado ha sido la hasta ahora viceconsejera Lina García, a quien hay que dedicar una placa de reconocimiento el día que finalmente se inaugure.

Repito, a Jaén le vendría muy bien que estas dos personas ocuparan los máximos puestos de responsabilidad en la Consejería, y no solo por la Ciudad Sanitaria, que será una obra histórica por la concepción que se ha hecho de la misma, la infraestructura más moderna de Andalucía, sino porque también es una garantía para dar respuesta a todas las necesidades en materia de sanidad, donde bien sabemos que existe margen de mejora, empezando por la atención primaria que exige una más rápida respuesta, porque no se puede atender a un usuario quince días después de solicitada una cita, al tiempo que hay que agilizar las listas de espera y proyectar más y mejor la concepción de sanidad pública, con independencia de que el sistema precise apoyarse en los medios privados, pero no a costa de desmantelar o reducir la fortaleza de lo público como garante de calidad y eficiencia.

Foto: Catalina García y José Antonio Miranda. (JUNTA DE ANDALUCÍA).

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