Skip to main content

 

De vez en cuando apetece echar un vistazo a las hemerotecas, porque en los periódicos está recogida toda la historia de la ciudad para bien y para mal. Al dedicar un rato a esto algunas veces sentimos alegría por los logros, los menos, pero en la mayoría de los casos se nos cae la cara de vergüenza de las dejaciones tan clamorosas que han existido. Ahora no vamos a remitirnos a los siglos pasados, hablamos del periodo democrático, en concreto de los últimos 20 o 25 años, en los que tantas veces los políticos, en defensa de sus intereses, de sus puestos y de sus buenos sueldos, han llegado a prometernos hasta la luna, una sucesión de canto de sirenas que han sido eso como demuestra de manera palpable la situación actual, en la que de todo lo anunciado se ha conseguido un porcentaje bajísimo. Es una situación no ya para estar molestos, sino para desconfiar de cualquiera que no venga con los papeles firmados en la mano antes de plantear cualquier compromiso.

Tengo ante mí una información del Activa Jaén, un plan muy criticado –Jaén siempre con sus planes, parece que mendigando en lugar de exigiendo y recibiendo lo que en justicia le corresponde- pero que espoleó algunas actuaciones, hay que decirlo en justicia. Pues bien, en esa información publicada el 12 de marzo de 2011, hace seis años, los mismos que tiene el tranvía, eso sí, en vísperas electorales, como se suelen  hacer este tipo de cosas, se presentó en Jaén el entonces ministro de Fomento, José Blanco, que decía traernos la solución ferroviaria para la integración de la línea de Alta Velocidad Madrid-Jaén, con una inversión anunciada de ¡¡¡69 millones de euros!!!. El proyecto, según se dijo entonces, supondría la modificación del trazado de los dos últimos kilómetros de la línea ferroviaria existente, en los que se duplicaría la vía y se soterrarían 750 metros, en cuya superficie se pensaban construir viales y un gran bulevar. El trazado contemplaba finalizar en una nueva estación intermodal para reunir, en un gran nudo de comunicaciones, los trenes, los autobuses urbanos e interurbanos, los taxis y el tranvía. Para la ocasión acompañaban al ministro Blanco la entonces consejera de Obras Públicas de la Junta, Josefina Cruz; la alcaldesa, Carmen Peñalver; la consejera de Presidencia de la Junta, Mar Moreno; el secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías; el director general de Infraestructuras Ferroviarias, Carlos María Juárez, y el vicepresidente segundo de la Diputación, Manuel Fernández, entre otros. El resto ya es fácil imaginarlo, llegaron las elecciones, se olvidaron todos los planes, incluido el Activa, que con sus pros y contras era un apoyo expreso a las infraestructuras de la provincia. Es de suponer que ese proyecto estará por algún lado.

Hace poco tiempo el actual alcalde, Javier Márquez, reivindicó de nuevo la iniciativa, pero para sorpresa general ha sido el concejal no adscrito, Iván Martínez, el que ha llevado al último pleno una moción en defensa de la estación intermodal, que ha salido adelante con el entusiasmo de los populares, como no podía ser de otra manera. De hecho se ha indicado que el alcalde marcha la próxima semana a Madrid a mantener algún encuentro relacionado con la estación intermodal. Hace seis años, el promotor era el grupo socialista y el PP se mostraba escéptico, ahora ocurre lo contrario, propone el PP y los socialistas, por mucho que extrañe el cambio radical de posición, defiende ahora que la estación de autobuses debe estar en el centro, de hecho llamó la atención en el pleno el cruce dialéctico entre Matilde Cruz e Iván Martínez, en las defensas de las respectivas posiciones, totalmente encontradas, y con algunas descalificaciones de por medio. ¿Qué va a pasar?, esto no lo sabemos, pero está por ver si el Gobierno de Rajoy se pone a tiro para invertir en Jaén, siempre he creído que una estación intermodal es una inversión en futuro y que con buenas comunicaciones no se tiene que ver afectado el centro de la ciudad y su comercio, todo lo contrario se facilitaría la peatonalización y un tráfico menos agresivo. ¿Se retractan los socialistas de su propuesta al Plan Activa, o el tiempo transcurrido les ha hecho cambiar de planteamiento? Lo que es una realidad indiscutible es que unos y otros están en la eterna improvisación. Y en el caso del alcalde tratando de ganar tiempo y, a pesar de las dificultades, procurar sumar todo lo que pueda para Jaén, donde se espera que le pueda echar una mano Fernández de Moya, porque de lo contrario para qué queremos políticos de Jaén en los gobiernos…

Otro de los proyectos que no han dejado dormir al regidor, el bueno de Márquez, ha sido el del centro comercial Jaén Plaza. Su optimismo choca con una cierta sensación de incredulidad que se ha instalado en distintos sectores de la opinión pública, incluso entre la propia familia del PP jienense, más aún cuando la Hacienda Las Cuevas, vinculada al proyecto del otro centro comercial que fue el primero en anunciarse, Santo Reino, en la zona de Vaciacostales, cerca de donde tendría que estar la estación intermodal, han respondido con dureza al inicio de las obras frente a la Universidad, que han definido como una “entelequia”. Esta historia va a seguir dando que hablar.

En el último pleno más que detenerme en los asuntos que se trataban, que también, he estado especialmente pendiente de las intervenciones, de las afinidades, de las complicidades, del posicionamiento de los grupos. Me gusta la racionalidad de JeC, con sus tres concejales, incluso el tono, exigente pero siempre cuidando las formas. Los no adscritos va cada uno por su lado, Iván Martínez, más pegado al PP que lo tiene como un aliado o un apéndice, Víctor Santiago que está poco más o menos, pero manteniendo alguna distancia, y Socorro Anguita cuya postura creo que es mucho más clara, apoyar todo lo que considera que es bueno para la ciudad, de esta manera constructiva se va a equivocar poco. Los dos grandes partidos son los que están enconados. El ejemplo de la estación intermodal es muy ilustrativo, pero se enzarzan por casi todo, bien es cierto que ya no con la virulencia de otros tiempos, pero casi todas las discusiones tienen que ver con las competencias de la Junta de Andalucía. Ahí es donde el PP sabe que le duele a los socialistas y le aprietan sistemáticamente, y el PSOE no ha logrado salir de esa hipoteca que le resta a veces credibilidad en el pleno y a la hora de la verdad votos en la ciudadanía. Y conste que me sigue encantando Mercedes Gámez, por su frescura y espontaneidad, y María del Mar Shaw, porque es la voz de la experiencia, y la propia Matilde Cruz porque es incisiva y directa, a veces demasiado, pero esta mujer ha aprendido mucho. Esta vez no he visto intervenir, a través de Onda Jaén, por donde sigo el pleno, a Manuel Fernández, pero el portavoz es bueno, un valor seguro, dice las cosas con claridad pero es correcto y poco se le parece al Fernández Palomino de unos cuantos años atrás, qué va. Por lo que se refiere al PP también tiene buenos fajadores. Reyes Chamorro y Rosa Cárdenas hacen muy bien su papel, son dos mujeres válidas y con carácter. Tampoco he escuchado al viceportavoz del PP, Miguel Contreras, otro que se las sabe todas y que en contra de lo que algunos pronosticaban, también tiene mando en plaza en el Consistorio. No quiero extenderme porque cada cual en lo suyo hace su papel, pero me van a permitir que me fije en Manuel Francisco Heras, uno de los más jóvenes, o el que más, que tiene un buen talante y que sabe escuchar. Otro día seguiré con el resto.

Por lo que respecta al alcalde, Javier Márquez, algo ha cambiado, está muy a la defensiva, entiendo que a veces le hacen saltar y aunque mantiene su elegancia y su actitud de prudencia, cada vez que puede afirma que el único que ayuda al Ayuntamiento es el gobierno de la nación, porque ni la Junta ni la Diputación lo hacen, sobre todo la Junta dice que pasa olímpicamente de Jaén. El mismo discurso de Fernández de Moya, eso sí, bastante más moderado en las formas.

Marroquíes, la cantera, el tranvía…

Naturalmente, como cabía esperarse, el equipo de gobierno municipal se ha aprovechado de las últimas noticias sobre la zona de Marroquíes Bajos, elevando el alcalde una propuesta para conservar los solares municipales de manera que se conviertan en jardines arqueológicos. Surge una interrogante, ¿habrá que cambiar de lugar el Conservatorio? La delegada de Educación dice que el cronograma se mantiene. Ahora estamos muy interesados en saber cuánto tiempo nos dura a los jienenses el subidón de autoestima proporcionado por National Greographic, porque poco a poco el debate va languideciendo. El que no pasa, por ahora, es el relativo a la famosa cantera de la Fuente de la Peña. Numerosos colectivos se acercaron en la tarde del viernes a la zona para reivindicar que se detengan los trabajos. Esto sí que es imparable porque es un objetivo que determinados colectivos ciudadanos se han propuesto como una exigencia mientras las administraciones hacen oídos sordos. El alcalde, por ejemplo, dice que es la Junta la que tiene que parar la cantera. La Junta hay veces que parece ausente, de hecho no ha contestado al alcalde cuando ha afirmado con rotundidad que “La Ciudad de la Justicia no se ha hecho porque la Junta no ha querido, porque no da votos”. Quizá sea cierto, pero en esto de los votos van todos emparejados, ¿cuántas cosas ha hecho y no ha hecho el PP pensando en los votos? Dime de qué presumes y te diré de lo que careces.

Por lo que respecta al tranvía, el delegado territorial de Fomento y Vivienda, Rafael Valdivielso, a quien tenemos puesto en un altarito porque es alguien que se lo curra, acaba de decir, y esto no es su opinión, sino la de la Junta, que la oferta del gobierno andaluz con respecto al sistema tranviario de la ciudad “es inamovible”, con lo cual parece que está todo dicho, porque lo que tenemos entendido del Ayuntamiento viene a decir lo mismo. Cuando se tenga preparada la adjudicación de la asistencia técnica será cuando se reúna la comisión del tranvía y tal vez habrá ya concreciones. Lo que no es de recibo desde ningún punto de vista es soportar SEIS AÑOS con el tranvía encerrado a causa de los unos y de los otros. Si no hay acuerdo habrá que someterlo a consulta, se lo he oído decir a Miguel Segovia y no me parece mal, cuando no hay posibilidad de entendimiento es preferible acudir a medidas extremas que seguir siendo el hazmerreír de toda España. Por cierto que esta semana adjunté el recorte de un periódico de Málaga donde se decía que la Junta va a pagar casi 12 euros por cada viajero que se suba al metro hasta 2019. Que cada cual saque sus conclusiones.

No hablaré del casco antiguo, otro asunto recurrente de la semana, porque ya lo he dicho casi todo en mi comentario “Cuánto postureo con el casco antiguo de la ciudad…”, pero añado que comparto el criterio de María Cantos, la presidenta de O.CO de no empezar la casa por el tejado, lo primero que requiere el casco antiguo es que se cumplan todos los compromisos adquiridos. Ya sería bastante para empezar.

Y una felicitación a los vecinos de la calle Cancio Uribe que van a ver que se arregla su calle, que falta le hace. Y por supuesto a la asociación de vecinos Loma del Royo que lleva tantos años peleando por la ejecución de la calle peatonal entre calle La Luna y Flores de Lemus, que ya justifica toda una brillante gestión de Francisco Céspedes y su activa junta. Es un dinero proveniente de una modificación para tapar huecos. Muy poco para todo lo que hay que hacer, pero eso tiene ser pobres rigurosos, que algunas conquistas saben mejor.

Para finalizar, he de confesarles que una de las estampas más bonitas del pleno, fue la presencia en él de Miguel Hernández, a través de la deliciosa declamación que Lola Fontecha hizo del poema “Aceituneros”. Emocionante y justo.

 

Foto: De izquierda a derecha, en foto del 11 de marzo de 2011, hace seis años, Fernando Calahorro, María del Mar Moreno, Carmen Peñalver, José Blanco, Gaspar Zarrías y Josefina Cruz. Algo ha llovido.

Dejar un comentario