Por ANTONIO GARRIDO / Ciertamente como señalo en la cabecera de esta crónica en Jaén estamos necesitados de buenas noticias y de vez en cuando ocurren. Hay algo que inquieta mucho socialmente y es que llevamos un tiempo que a todos los niveles, aunque es más evidente en el panorama nacional, el protagonismo está asumido por los políticos y sus impresionantes líos, pero apenas se aborda lo que al común de la gente nos interesa, la política como instrumento para debatir y resolver los problemas de la gente. No hay más que leer los periódicos, escuchar la radio o seguir los telediarios para hacerse una idea del lodazal en que se ha convertido el escenario, que en muchos aspectos trasciende a las comunidades, también a la nuestra, y por supuesto al territorio en el que habitamos, ya se sabe que lo malo se propaga con rapidez. Dios quiera que pase esta sarampión, no hay mal que cien años dure, y unos y otros se puedan dedicar, también los ciudadanos estamos seriamente afectados, a lo importante. Tenemos que hacer todos un máster en ejemplaridad.
Pero pongamos buena cara al mal tiempo, aprovechando que aparecen en nuestro horizonte particular algunos brotes verdes. No hay que lanzar las campanas al vuelo, pero hay que aferrarse a todo lo bueno que nos pase. Esta semana, ayer mismo, se inauguraba por todo lo alto, y no era para menos, la sede en Jaén, en las dependencias de la que fuera sede central de Caja Rural, en el Paseo de la Estación, de una importante empresa de consultoría informática, Nter Solutions and Technologies, que cuenta con alrededor de 500 puestos de trabajo, muchos de ellos en el centro que se establece en esta capital, y también gran parte de ese potencial está compuesto por alumnos egresados de nuestra Universidad de Jaén, con la que ha establecido la empresa estrechos lazos de colaboración y alianza. Todo lo que sea poner alfombra roja a las empresas, más todavía en este tiempo a este tipo de sociedades innovadoras que representan el futuro, es un motivo de esperanza y para alejarnos poco a poco de nuestro victimismo, de la creencia de que no teníamos redención posible, vamos que éramos un caso perdido.
Celebro la llegada con fortaleza de esta empresa Nter, que todas las autoridades han elogiado, y no es para menos, pues como ha señalado el rector de nuestra Universidad, Nicolás Ruiz, un activista y entusiasta de la captación de este tipo de empresas punteras y que aportan I+D+I, son el instrumento necesario, más aún, imprescindible, para que el talento que sale de las aulas universitarias y de otros centros capacitados se ponga al servicio del desarrollo de la propia institución pero también de la provincia para generar riqueza. Lo ha dicho el propio rector, y él conoce bien ese mundo, este que se instala fuertemente en Jaén es un proyecto empresarial tecnológico de vanguardia, consolidado, añade Nicolás Ruiz, como referente nacional en consultoría tecnológica. Es una doble buena noticia, primero por la dimensión de la propia empresa Nter, que merece todos los aplausos, y segundo porque también significa que la UJA sabe acercarse al lugar donde están los aliados que interesan y darles calor. “La UJA está preparada para asumir retos”, añade el rector, y es verdad, tenemos en puertas el grado de Inteligencia Artificial y Ciberseguridad, y a continuación el de Ingeniería y Sistemas de Datos y Matemáticas. En una provincia en la que hemos estado décadas padeciendo adversidades, cada vez que surge una buena nueva es como para que salgamos a la calle a saltar de alegría. Tal vez debamos ser más cautelosos por el momento, pero las cosas buenas que nos pasen hay que celebrarlas.
En segundo lugar, acaba de informarse de una reunión de la Fundación Estrategias para el Desarrollo de la Provincia que promueve la Diputación y de la que forman parte las diferentes administraciones además de agentes sociales y económicos. En este momento se está trabajando en el diseño del que va a ser el III Plan Estratégico y los objetivos de cara al 2030, que es la siguiente meta. En este encuentro se han analizado los Indicadores Clave de la Provincia de Jaén, y se han concretado nada menos que en 445 aunque clasificados en once ámbitos estratégicos: industria, medioambiente y cambio climático, innovación, educación, cultura, turismo y patrimonio, olivar y aceite de oliva, transporte y comunicaciones, demografía, mercado de trabajo y bienestar social, salud e igualdad. Pues sí, en todos esos campos hay que trabajar y avanzar. Reconoce el presidente de la Fundación Estrategias, Francisco Reyes, que lo es también de la Diputación, la existencia de dificultades en el territorio, pero en su opinión hemos sido capaces de acortar la distancia que había entre Jaén y otros lugares del país. Imagino que lo podrá corroborar con datos, pero nos gustaría que así fuera, si bien hay que acelerar el ritmo porque estamos en un momento histórico en el que perder el tren, es un decir, no podemos permitirlo. De todas maneras, optimista redomado, sobre todo de un tiempo a esta parte, Reyes está convencido de que “lo mejor está por llegar y depende muchos de los jienenses”. Con esta última idea no puedo estar más de acuerdo.
Como observador percibo que van surgiendo, aunque sea muy lentamente, algunos brotes verdes a los que antes me refería, aunque las asignaturas pendientes hacen que la realidad gire aún hacia el pesimismo histórico a causa del papel que las administraciones han dado a la provincia, siempre dejada de la mano de los poderes y de los poderosos, y sigue. Es curioso lo que ocurre con estas reuniones de la Fundación Estrategias y es que las diferentes administraciones pugnan por demostrar, o mejor dicho, por tratar de demostrar, quién está más comprometida con Jaén. La Junta de Andalucía, por boca de su delegado Jesús Estrella, siempre llega a la cita con las cuentas del Gran Capitán, vuelve a insistir, en cada reunión lo hace, en que de los 63 proyectos de la segunda edición del Plan la administración andaluza ha impulsado y participado en el 85,85%, con más de 3.000 millones de euros, casi el 60% del total de la cuantía. Me gustaría tener el documento de donde saca estas cuentas porque por la lógica no veo que se corresponda con la realidad, salvo que entren en esa especie de cajón de sastre hasta los sueldos de todos los profesionales que dependen de la Junta en la provincia.
Efectivamente hay hechos durante la vigencia del II Plan que corresponden a la Junta, pero creo que a Jesús Estrella se le ha subido el ánimo, y la impresión muy generalizada es que la Junta, como el resto de las administraciones, invierte en Jaén menos de lo que debiera y tiene abiertos todos los frentes de los proyectos emblemáticos en lista de espera. De todas maneras el delegado del Gobierno andaluz se va por los Cerros de Úbeda y pone el acento en los déficits, pero en los que no dependen del gobierno al que representa, sino de la Administración central, es decir, el aislamiento ferroviario, que todos compartimos, y el desierto eléctrico, en el que se nos han encendido las luces a propósito del gran apagón del 28 de abril. Pero para que no haya duda, Estrella deja claro que el gobierno de la Junta seguirá implicado con las líneas estratégicas.
De la Diputación hay poco que decir, tiene menos presupuesto y precisamente por ser el padre de la criatura, nobleza obliga, que diría un conocido escritor francés, trata de dar ejemplo. En cuanto a la Administración del Estado, esta vez al discurso del subdelegado del Gobierno, Manuel Fernández Palomino, le ha acompañado la suerte, porque dentro de lo que cabe, y aunque queda mucho por hacer, están llegando cositas. Fernández Palomino pone énfasis en los fondos Next Generatión que representan hasta ahora 445,8 millones en la provincia, que según él han servido para transformarla y modernizarla. Para frases grandilocuentes los políticos no tienen competidores, lo que ocurre es que he de recordar, una vez más, que los propios políticos con responsabilidades anunciaron que esos fondos europeos tenían que traer a Jaén varios miles de millones, y tristemente no ha sido así. El balance hasta ahora es modesto. El principal activo del Gobierno de España en Jaén no cabe duda que es el Cetedex, no solo por la inversión y los puestos de trabajo que pretende crear, sino porque ya se está demostrando que es un poderoso foco de atracción para otras empresas. De esta manera el Gobierno de Sánchez ha tratado de sofocar el clima de indignación que provocó el Colce. El subdelegado mete en el saco la planificación eléctrica de cara a 2030, aunque eso es un futurible que cuenta solo a título de inventario, y en cuanto a la estación intermodal, solo sabemos que parece que va a ir por fases y una mínima está a punto, y por lo que se refiere a las actuaciones en materia ferroviaria, en la provincia que probablemente sea la peor tratada por el ferrocarril, no valen las palabras, hemos escuchado tantas promesas que se quedaron en agua de borrajas, que como Santo Tomás, ver para creer. Siempre lo he dicho, la Fundaciòn Estrategias y el Plan Estratégico es una magnífica iniciativa, el problema radica en que cada vez que se reúnen los representantes de las administraciones tienen que hacer un esfuerzo por “vender” algo nuevo. Jaén necesita más, mucho más, y hay que exigirle a las administraciones para que no se duerman en los laureles.
Foto: El rector de la UJA, Nicolás Ruiz, en una visita a la compañía tecnológica Nter Solutions and Technologies, con centro en Jaén. (UNIVERSIDAD DE JAÉN).


