Por ANTONIO GARRIDO / Hemos dicho adiós a una exitosa feria, no digo que demasiado larga porque la coincidencia en dos fines de semana lo hace inevitable, lo que ocurre es que sufren los bolsillos de los jienenses, porque feriantes y caseteros, aunque a veces se quejen, hacen su agosto, lo hemos visto casi cada día y hasta el minuto final. Vecinos de Jaén y visitantes han llenado casi a diario el recinto, la feria de la normalidad y con tiempo espléndido. La gente ha querido diversión, esta es la filosofía, busquemos los buenos momentos, que los malos ya vienen solos.
No hay que regatear las felicitaciones, cuando son merecidas, en especial al área de Cultura y Festejos y al frente María Espejo, que es una excepcional currante y ha hecho una feria a la medida de Jaén, muy digna, y eso a pesar de las limitaciones económicas de un Ayuntamiento arruinado, por lo tanto tiene doble mérito. Y estoy convencido, porque creo conocerla un poco, que va a mover Roma con Santiago para que el año que viene la feria tenga un pórtico como Dios manda, aunque sea patrocinado por algún colaborador especial. Me han dicho que la famosa portada de la Catedral se deterioró por los efectos del viento de Jaén y parte quedó inservible. Me lo creo lo preciso, porque ya ocurrió parecido con la exposición del Renacimiento ofrecida con motivo de los fastos del 92 en la Catedral y jamás se supo de ella, cuando debería haber quedado expuesta de manera permanente en cualquier lugar céntrico, como un recurso más. En fin, el estilo Jaén. Pero sí, la concejal María Espejo ha logrado que Jaén disfrute de una Feria de San Lucas grande, encima ni le ha llovido, y se ha podido disfrutar de conciertos muy exitosos y llenos de público, las magníficas actuaciones de nuestra emblemática Banda Municipal en la calle Bernabé Soriano, los grandes espectáculos taurinos…sin olvidar el plato fuerte del magnífico espectáculo de drones personalizado, con una gran participación popular y con emotivos mensajes en el cielo de Jaén para alimentar nuestro orgullo, nuestros símbolos más preciados y la mejor expresión posible para despedir una cita ferial: “¡Viva Jaén!”. María Espejo, enhorabuena, porque incluso en la dificultad económica ha logrado poner el listón bastante alto.
Foto: María Espejo, concejal de Cultura y Fiestas del Ayuntamiento de Jaén, responsable de la recién finalizada Feria de San Lucas.
En este cariño de Jaén por su feria de San Lucas, el pueblo siempre estuvo por encima de los programas de festejos, lo cual no es una crítica para los organizadores, sino un elogio del entusiasmo y de una manera de ser. Jaén y los jienenses lo dan todo. Por cierto, parece que tenemos una asignatura pendiente, conozco pocas ciudades y pueblos donde durante toda una semana la población infantil y juvenil mantenga sus actividades escolares y académicas mientras la ciudad vive sus fiestas, porque impide vivirlas en su plenitud, no sé qué dificultades hay pero siempre me ha llamado la atención que no se puedan conciliar una vez al año las fiestas con una actividad docente menos estricta. Pero en fin, vivan las tradiciones de esta Bella Ciudad de Luz. Y por cierto, bienvenidas las ‘chilindrinas’, que recuperan su saludable crítica.
Estas ‘chilindrinas’ que tanto le deben al periodista Tomás Moreno Bravo (Jaén, 1909-1990), al que en su día me unió una gran amistad, al igual que a otro ilustre que lo sucedió, José Villar Casanova, “Vica”, siguen siendo, como en toda su trayectoria desde 1998, una forma desenfadada de ver Jaén, adobada con una necesaria y saludable crítica, y sigue existiendo cada año gracias al impulso de la Asociación Arco del Consuelo-Casco Antiguo, pero que encuentra gran colaboración en colectivos como Viñeta 6 y otros que aprecian esta cita anual que ya es un clásico. Todos los años cientos y cientos de jienenses pasan por la verja de la Diputación Provincial, donde se cuelgan los enormes lienzos, donde los promotores, a los que hay que felicitar, no dejan títere con cabeza. En la cantidad de paneles expuestos hay temáticas propias de Jaén y otras generales, porque esta iniciativa surgió con un carácter local pero también con visión universal, todo cabe en las ‘chilindrinas’. Este año se ha criticado, con toda justicia, la situación del entorno de la Catedral, manifiestamente mejorable, porque en la actual situación es absurdo pensar que nos concedan el honor de ingresar en el selecto club de Patrimonio de la Humanidad; por supuesto aparece el clamor por la situación del casco histórico, otra denuncia que se va repitiendo a través de los años, con poco éxito, dicho sea de paso; aparecen asimismo, y es un drama, las dificultades de nuestros jóvenes para encontrar trabajo en Jaén, a pesar de que son los mejor formados, talento de Jaén, que conoce las bonitas palabras que con tanta frecuencia se repiten desde la política, pero que han de coger la maleta para buscar en otro lugar de España o el mundo la tierra prometida; por supuesto aparece la Universidad de Jaén, y la presión a la que le ha sometido la Junta de Andalucía por cuestiones económicas, el famoso Modelo de Financiación del que se está a la espera de si al final se cumple o se trata de otro brindis al sol, en tanto que se alude a la decepción que causó antes del verano la negativa del Grado de Ingeniería Biomédica, que finalmente se ha resuelto, pero no precisamente porque la Consejería de Universidades haya actuado en su favor, porque la verificación se la debe Jaén al Consejo de Universidades estatal.
En los paneles hemos observado igualmente el reflejo de las más importantes carencias de esta ciudad capital de provincia, así se alude al AVE como otra leyenda más de Jaén, y en cuento a la visita del ínclito ministro Óscar Puente, los inspiradores de las ‘chilindrinas’ no las tienen todas consigo, porque vienen a decir que palabras, palabras, palabras…porque ni estación intermodal, ni aves, ni trenes puntuales, pero sí carreteras medievales y trenes de todo a cien. Por supuesto no podía faltar el tranvía, que estaba a punto desde 2011 y ahora dicen que se va a poner en marcha, ya veremos si de inmediato o cuando falte un mes para las elecciones autonómicas. Sale a relucir, obvio, el eterno proyecto de la Ciudad Sanitaria, y se comenta que desde que Francisco Reyes abandonó el cargo de secretario general del PSOE y se ha centrado solo en Diputación se ha parado el reloj del Palacio Provincial. En cuanto a Agustín González Romo, el exalcalde del PP, la ‘chilindrina’ recoge que “fue desbancado por no cumplir lo pactado”. Por último en esta parte de los asuntos propiamente ciudadanos se dedica un cariñoso recuerdo a tres grandes ausencias durante el último año: Pilar Sicilia. Juan Murgado y Tomás Cano. Al margen, los promotores no se olvidan de cuestiones del mundo y de España que lógicamente nos afectan: casos de corrupción, el lamentable caso Mazón del político que sigue en sus trece con la complicidad de la dirección popular, el episodio tan poco edificante, mejor dicho, vergonzoso, protagonizado por Cerdán, Ábalos y Koldo, en el PSOE, al menos los que hasta ahora se conocen, pero tampoco se olvidan los dibujantes de nuestro paisano Montoro que tiene cuentas pendientes con la justicia. Y se recogen asimismo desde las extravagancias de Trump, sus aranceles y su puesta en medio en los conflictos mundiales para ganarse el Nobel de la Paz, y, claro, está el tema del año, el genocidio que ha movilizado al mundo entero por una cuestión de dignidad. Dejo para el final algo que nos coge más cerca, la crisis sanitaria en Andalucía por el cribado de cáncer de mama, verdaderamente espantoso, que coincide también con la evidente privatización de la sanidad que por la cara niegan cada día los políticos populares, con lo cual están insultando a nuestra inteligencia puesto que lo vemos con nuestros propios ojos.
Y en feria, un clásico, romería de políticos. A los socialistas se les ha visto, sobre todo en los primeros días, en los que su secretario provincial, Juan Latorre, prácticamente no ha salido del recinto ferial para estar con su gente, hemos visualizado fotos en los que podía fácilmente pasar lista porque estaba toda la tropa. Se ha visto en amor y compaña, ignoro la calidad de las relaciones, a personas de los dos bandos que se movilizaron para las elecciones a la secretaría general, no sé si se trata de pelillos a la mar o porque como vienen elecciones es mejor estar en el sitio adecuado en el momento justo. Por lo demás Latorre parece un buen anfitrión, cordial y afable en las distancias cortas, pero el discurso público es un tanto impostado, supongo que forma parte del argumentario, a las órdenes de María Jesús Montero. No diré que no le pinta, porque tampoco lo conozco tanto, pero me da que es propicio para parte de su electorado, el más fiel, el que seguro le va a votar, pero para otro sector puede que no convenza y espere del líder de los socialistas un tono más mesurado y de propuestas reales, en lo posible centradas en la provincia. Y cuando digo reales me refiero a que no se abuse de los brindis al sol, esa ha sido la actitud de los socialistas durante muchos años y visto con perspectiva no les ha dado mucho resultado. Un poco de realismo, de bajar a la arena, le vendría bien. También exigir y al tiempo exigirse. No puede ser que el Gobierno de Sánchez lo haga todo bien y el de Moreno Bonilla todo mal, aunque ambos son deudores con Jaén pero a base de bien.
En la familia del Partido Popular me da por pensar que durante estos días han vivido literalmente en la feria, digo lo mismo que de sus adversarios, donde Erik Domínguez ha estado con su gente de caseta en caseta, lo han tenido más fácil porque no ha sido la hora de rendir cuentas con los presupuestos de la Junta, ahora todo es euforia y paseo militar, ya veremos dentro de unos días. Tampoco ellos han tenido que mojarse en el conflicto sanitario, de hecho la viceconsejera María Luisa del Moral parece que no ha aparecido, digo parece porque yo no he sido asiduo. Pero lo dicho, Erik Domínguez ha paseado por el ferial, con su actitud que es de natural agradable, abrazos y saludos, es la cara amable de los populares y parece que por el momento no tiene competencia. Y ha estado acompañado de su guardia pretoriana, Elena González y unos cuantos que no ocultan su semblante alegre cada vez que el jefe abre la boca. Le han preguntado al líder por previsiones, nombres, candidatos…pero eso no toca, tras el congreso de noviembre puede que se vayan conociendo las novedades, que dicen que habrá y no pocas.
También Jaén Merece Más ha tenido su minuto de gloria festivo, es evidente que dispone de menos medios, pero tampoco le falta ilusión y coraje para enfrentarse a las realidades por las que vive la ciudad vista desde su Ayuntamiento, el gobierno municipal. Saben que podrá compartir las buenas noticias, pero también será responsable subsidiario de los fracasos. Ya se han visto asuntos importantes para la ciudad en la que los dos socios han asumido los éxitos para sus respectivas formaciones, y ese es un indicio de que los retos electorales se van acercando. El partido provincialista parece que tiene deseo de repetir experiencia en las autonómicas. Es su decisión, pero lo tienen complicado porque esta vez la polarización tiene tres patas, todo el mundo lo sabe. Claro que las elecciones tampoco son ciencias exactas, hay que esperar a la encuesta tamaño natural, puede haber electores que pasen del modelo que nos van a poner sobre los ojos y reclamen alternativas, de ser así podría haber opción, pero hay que partir del hecho de que la situación no es la misma del año 2023. El escenario político ha cambiado, para bien o para mal, pero es diferente. Sea lo que Dios quiera.
Termino como empecé, la feria ha venido a recordarnos lo que somos, historia y grandeza. Y lo grande por buena voluntad que se tenga no se puede plasmar ni en el más más hermoso de los cuadros, ni en la más sublime de las músicas. Terreno abonado para los mejores productos del amor jienense ahora y siempre.
